quarta-feira, junho 04, 2014

Es la ciencia inevitablemente reduccionista?



Pido perdón a la ciencia, a Jesús Zamora, a la filosofía...

De nuevo no, por favor, no vale la pena cargarse de nuevo a la espalda toda la carga de los pecados del mundo. Reducir los problemas. Que grata es la idea de que de lo que no se puede hablar, mejor permanecer callado. Las palabras habrían de ser demasiado certeras, los conceptos exactos o justos. Mejor justo un concepto? Sí, sin duda.

La postura fisicista afirma que todo lo que compone el mundo es lo que la física dice. Una postula fisicalista, simplemente, que todo lo que compone el mundo es físico. Alguién duda de ello? Naturalistas, reduccionistas, deterministas, de forma general y con excepciones, creerán que con la física y la química explicamos los eventos físicos, y como estos eventos son toda la realidad, el buscar el concepto justo, perceptivo, que represente el mundo (Me gustaría añadir que ese concepto justo también representa al alma y Dios)explicará la realidad. La realidad está presente, escapándose, de acuerdo, pero la sentimos y la escribimos o la leemos. Pero la ciencia la busca, inevitablemente, no cesará en su empeño. Es natural. Convencional también si se quiere. Porque Adán y Eva comieron del árbol prohíbido, el árbol del bien y del mal, el árbol de la ciencia. A partir de ahí comienza un mito, el del ser humano. Hoy ese mito es compartido con mitos de todo tipo, incluso científicos. Por que aún no me he enterado lo que un humano busca cuando hace ciencia, cuando es justamente humano. La filosofía es una parte de la ciencia, esta ya ha unido lo que nunca hubo de escindirse, la ciencia y la filosofía, la episteme y la epistemología. En esta identidad estructural lo normativo ya es asunto propia de una ciencia que si necesita a la filosofía, la necesita desde sus propias leyes empíricas.
Brian Eno relaja la existencia, fruto del pecado que creó al ser humano. Bendita la hora en que comimos la manzana del árbol prohibido. El nacimiento del ser humano, cuando el ser creado a semejanza de Dios, dejó de serlo, para volverse mortal, enfermo...es más fácil creer en otro mito, el de la evolución. Este último es mucho más preciso, exacto. Posee leyes y teorías que avanzan en su conocimiento, control y manipulación de la materia. El alma ya es un recuerdo ilusorio. Queda información, en los corazones, en la memoria, en la satisfacción de sentir los últimos suspiros de la más guapa de las madres...